Hace mucho tiempo, durante un largo viaje el rey y su camarilla pasaron a refugiarse en un molino, porque se lió una tormenta muy grande.
Entonces el molinero dijo:
-Mire usté, yo le haría comida, pero es que no tengo casi dinero, ni comida, ni eso... Pero, bueno, le voy a poner unos tallarines de comida.
Le puso la comida, y entonces le sirvió agua en vez de vino. Y le dice el molinero:
-Si tuviera agua, le daría vino; pero como no tengo agua, le doy agua. El rey se quedó pensativo y decía:
-¿.Qué pasará? ¿Por qué dirá este señor esto: que no tiene agua y nos da agua, y si tuviera agua nos daría vino?
-Mire usté, yo le haría comida, pero es que no tengo casi dinero, ni comida, ni eso... Pero, bueno, le voy a poner unos tallarines de comida.
Le puso la comida, y entonces le sirvió agua en vez de vino. Y le dice el molinero:
-Si tuviera agua, le daría vino; pero como no tengo agua, le doy agua. El rey se quedó pensativo y decía:
-¿.Qué pasará? ¿Por qué dirá este señor esto: que no tiene agua y nos da agua, y si tuviera agua nos daría vino?
¡A ver quién lo resuelve!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, escribe cuidando tu ortografía e identifícate